¿Cómo asegurar un pago en linea?
El fraude en los pagos se está disparando. En 2021, en Europa, el número de ataques se disparó un 208%. Por ello, es importante mantenerse alerta durante las transacciones en línea para mejorar su seguridad.
Los riesgos de las transacciones en línea
El riesgo cibernético está muy presente hoy en día, en España y a nivel internacional, tanto para las empresas como para los particulares, especialmente en lo que respecta a los pagos digitales. Los estafadores son cada vez más astutos y disponen de métodos muy eficaces para obtener los datos bancarios de sus víctimas
Entre estos métodos, uno de los más conocidos y utilizados es el phishing. Este método consiste en enviar un correo electrónico o sms a las personas objetivo, particulares o empleados de una empresa, que contiene un enlace o un archivo adjunto que permite al estafador obtener los datos confidenciales de estas personas. La mayoría de las veces, los datos recogidos son datos de acceso a una cuenta bancaria personal o al sistema informático de una empresa. Cuando los objetivos son particulares, el objetivo es identificar al titular de la tarjeta para recuperar sus datos personales sensibles. Con esta información, pueden realizar pagos fraudulentos.
También destaca el pirateo de sitios web: el estafador entra en sitios que pueden registrar los pagos con tarjeta de crédito de los usuarios para utilizarlos fraudulentamente. Son principalmente los particulares los que se ven afectados por estos ciberataques, dirigidos directamente a sus tarjetas bancarias o a cualquier otro medio de pago.
Los servicios financieros en las empresas también son un objetivo prioritario de ataque, en particular por fraudes del falso proveedor o fraudes del falso CEO. El defraudador tiene dos enfoques diferentes en función del tipo de fraude elegido. Se hacen pasar por un proveedor y exigen el pago de las facturas en una cuenta nueva. También pueden hacerse pasar por el presidente de la empresa y solicitar el pago a toda prisa y con discreción de la persona que gestiona los pagos.
Por último, algunos sitios web fraudulentos pueden utilizar los datos bancarios facilitados por los usuarios al realizar un pedido para efectuar otras operaciones de retirada de fondos distintas a las iniciadas por dichos usuarios.
Los casos mencionados anteriormente son las situaciones más comunes de fraude en los pagos , dirigidos directamente a particulares y profesionales. Estos casos muestran la importancia de verificar la autenticidad de terceros, sus datos de contacto, las solicitudes de pago o incluso la tarjeta en cuestión. En las empresas, esta responsabilidad suele recaer en el departamento de compras o en el de tesorería, que deben aplicar procedimientos de seguridad que pueden incluir un software de seguridad de pagos. La elección del método de pago utilizado es muy importante, y existen herramientas bancarias que permiten asegurar las comunicaciones financieras sobre datos de terceros. Sin embargo, esta herramienta se limita a los países miembros de la zona SEPA, que comprende principalmente países miembros de la Unión Europea, y es sólo un ejemplo de los servicios de pago que ofrecen este tipo de seguridad.
Buenas prácticas para asegurar un pago
Para protegerse de estos riesgos y mejorar la seguridad de un pago en línea, existen proveedores de servicios que ofrecen reforzar la seguridad de los pagos. Esto puede hacerse a través de un software de seguridad de pagos o de servicios ofrecidos directamente por el banco y que actúan sobre un pago con tarjeta de crédito.
Estas son también las buenas prácticas que hay que adoptar:
Para particulares
En el ámbito profesional
¿Qué herramientas podemos utilizar?
Para aplicar las buenas prácticas, existen herramientas para asegurar los pagos en línea y verificar los datos bancarios.
Algunos ejemplos:
Y para las empresas que deseen asegurar y digitalizar su proceso de pago, Sis ID ofrece una plataforma colaborativa de autenticación de datos bancarios, disponible en versión SaaS o integrada en sus herramientas (ERP, TMS, etc.). Permite a las empresas controlar a sus terceros y beneficiarse de la experiencia de su comunidad para asegurar sus transacciones bancarias.