¿Cómo luchar contra el fraude en las empresas?
El fraude y los ciberataques son especialmente frecuentes en las empresas.
Desde la crisis sanitaria, estas empresas se enfrentan a cambios: equipos modificados, teletrabajo impuesto, procesos transformados… Objetivos ideales para los defraudadores que aprovechan la menor debilidad de una empresa para realizar un ataque.
Ciberataques en las empresas
Los ciberataques son cada vez más violentos. Hay un verdadero aumento. Las empresas se enfrentan a la suplantación de identidad, al hacking, al ransomware y a la violación de datos.
En las empresas, los ciberataques tienen como objetivo obtener dinero o información confidencial. Los ataques más comunes son los que implican programas espía, infiltración en el correo electrónico y phishing. El ciberataque más común es el ransomware, que ha aumentado un 47% desde el primer trimestre de 2021 (Digital Shadows).
El fraude bancario, azote de las empresas
El fraude empresarial también es un fraude bancario. El fraude del falso proveedor representa el 47% de los intentos (barómetro de Euler Hermes). Consiste en hacerse pasar por un proveedor y cobrar en su lugar falsificando el IBAN.
Este tipo de fraude es el más amenazante para las empresas. Preparado de antemano, crea una laguna en el proceso de seguridad de los datos.
El fraude del falso CEO también es muy común. El estafador asume la identidad de un director de empresa y pide a un miembro del equipo financiero que realice una transferencia excepcional. Jugando con la presión y la confidencialidad de una transacción, el fraude es solapado con importantes consecuencias para una empresa.
